Anécdota de domingo por la mañana

Como no podía ser menos, antes de ir a por los tajinastes, había que pasar por el palomar para dejar a la "otra familia" perfectamente atendida y fue allí donde me llevé la primera sorpresa agradable del día. Me habían devuelto el macho de 2006, que perdí en el primer Santa Cruz de Tenerife de este año. Esta vez venía igual de impecable que el 019 de la semana pasada, pero, además, traía el teléfono de quien me lo había recuperado. Cojo y, sobre la marcha, le doy una llamada, para dar las gracias. Tras las presentaciones y que le agradeciera su gesto, seguimos hablando un rato sobre las palomas y en esto que salió el tema de por qué me había llegado el palomo ayer domingo, cuando no es normal soltar una paloma devuelta en día de concurso. Yo lo había notado, pero no me pareció adecuado decirle nada, para mi era más que suficiente que lo hubiera mandado de vuelta. Según me explicó este amable compañero de afición, la paloma me regresó el domingo porque la había tenido que encestar como suya, fuera de concurso, porque si ponía un macho como ese... con esa pinta, de 2006 y con chip en la cesta de las "devueltas"... seguro que iba de vuelta, pero para casa de algún amigo de lo ajeno... Ufff!!! hay que ver cómo andan las cosas por estos mundos de Dios!!!... en cualquier caso, muchas gracias por haberse dado esa molestia extra de no sólo devolverlo, sino, además, camuflarlo... je,je,je,je

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