Hace unos días, leía en un foro colombófilo el tenso intercambio de "opiniones" que se producía entre el editor de una revista-panfleto publicitario-colombófilo y sus defraudados suscriptores, que, según comentaban, no habían recibido los números de la citada publicación, a pesar de haberlos pagado religiosamente y por adelantando, a los que el primero de ellos se había comprometido. Sinceramente, comprendo a ambas partes, pero especialmente a la primera de ellas, pues hoy en día nadie hace nada por amor al arte y para perder dinero, mejor quedarse en casa.Sin querer dar consejos a nadie, creo que el fracaso de dicho proyecto se ha debido, en gran medida, a la carencia de contenidos de calidad, que han hecho que el producto sea de muy poco interés para la mayoría de los colombófilos. ¿Qué quiero decir con esto?... pues que mejor que contarlo con un ejemplo. Miren la foto que acompaña a este artículo (bueno... seguro que ya la habían mirado y varias veces), pues eso es lo que se denomina una "publicación atractiva para el colombófilo medio"... je,je,je. Les traduzco los titulares, de arriba a abajo y de izquierda a derecha:
- Revista "Palomas Calientes".
- Cuidando del colombófilo.
- ¿Cómo obtener más clientes para su palomar?
- Los colombófilos más en forma del mes (Nota del traductor: los ingleses emplean la misma palabra para decir "en forma" que "caliente", por lo que aquí se produce un juego de palabras, ya que también se podría entender que se habla de los colombófilos "más calientes"): Kimberly y Carol, que comentan: "Nos gusta tenerlas sueltas".
- Consejos del veterinario: "Los pechos blancos son atractivos".
- Reportaje especial: Vea que fácil es hacer que sus vecinos se interesen por las palomas.
La foto original y los retoques que se han hecho en la misma son cortesía de mi amigo Martin Kwakernaat, fotógrafo profesional de palomas.
P.D.: Evidentemente, todo lo comentado en este artículo es en tono de broma... bueno... casi todo.
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